En general, en los países de habla alemana está muy extendida la costumbre de hacer galletas en la temporada de Adviento; incluso algunos compran cajas de latón para obsequiar con estos dulces a amigos y familiares. Nosotros decidimos unirnos a la tradición y el pasado domingo nos dedicamos a cocinar y comer galletas con unos amigos. La experiencia, como os podéis imaginar, resultó de lo más dulce. Fue muy divertido el cruce cultural: villancicos en español y en alemán, la versión autriaca improvisada de la zambomba, los cuernos de Rudolf que adornaban nuestras cabezas para entrar en ambiente... En la foto podéis ver el resultado gastronómico, qué empacho!
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